La propuesta pretendía que los desempleados valencianos ue encuentren trabajo por mediación de esta oficina dejen de pagar las 2.000 pesetas, más el IVA, que actualmente cobra la agencia por las gestiones realizadas con las empresas contratistas.

Los diputados del PP y Unión Valenciana votaron en contra de la propuesta por considerar que el Servicio Valenciano de Empleo es una entidad privada, aunque participe con subvenciones el Gobierno valenciano. Su objetivo a medio plazo es la autofinanciación con las cuotas de los desempleados y las empresas que paga por este servicio, según declaró a Servimedia la diputada del PP María José García Herrero.

La oposición en las Cortes Valencianas ha propuesto que el Gobierno regional deje de subvencionar esta oficina, porque, siguiendo la misma regla, el Ejecutivo autonómico debería subvencionar también otras agencias de colocación, como SOS -para parados mayores de 45 años-, la agencia de colocación de la Cruz Roja y Ayuda al Refugiado, según indicó el diputado socialista Eduardo Montesinos.

En sus estatutos el Servicio Valenciano de Empleo se define como una "fundación, sin fines lucrativos", cuyo patronato está integrado por representantes de Generalitat, la patronal y los dos sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT.