El portavoz del PP en la Comisión de Interior de la Cámara Alta, Ignacio Cosidó, explicó que la moción asegura que las dos acciones terroristas registradas en Murgia y Balmaseda constituyen una "perturbación de la convivencia democrática" y afectan a instituciones básicas del Estado, como la Justicia o las comunicaciones.

Por ello, el PP del Senado propone la "condena de la forma más enérgica a los últimos atentados de la banda terrorista ETA", así como que la Cámara exprese "la solidaridad con las instituciones contra las que la banda terrorista ha atentado y con sus trabajadores".

El texto manifiesta también el rechazo a todo tipo de violencia u otros actos que atenten contra la democracia, la libertad y los derechos de los ciudadanos, y expresa una vez más la intención firme de seguir luchando hasta conseguir la completa derrota de la banda terrorista ETA sin hacer ningún tipo de concesión. El segundo punto de la iniciativa insta al Gobierno a suscribir esta declaración de condena.

Cosidó afirmó que la mejor respuesta contra el terrorismo sigue siendo, además de la policial, la legal y la internacional, la social. "Si queremos que los ciudadanos estén permanentemente movilizados contra el terrorismo, las instituciones tienen, tenemos, la obligación de encabezar toda respuesta", señaló Cosidó, quien aseguró que la parece muy sorprendente la ausencia de condenas oficiales procedentes del Ministerio del Interior.