En el documento de propuestas de acuerdo para la comisión que los populares presentaron esta mañana, el primer partido de la oposición aboga por que la negativa a dialogar con los terroristas se vea complementada por una reafirmación de la unidad de todas las fuerzas políticas en la lucha antiterrorista.

Esta es una de las cuarenta propuestas trasladadas a la comisión del 11-M por el partido de Mariano Rajoy, que también plantea que se inste al Gobierno a realizar las reformas necesarias "para que los delitos de terrorismo no prescriban en ningún caso".

Otras reformas legales planteadas por los populares son que se modifiquen las normas existentes "para agilizar el control y, en su caso, la expulsión de los sospechosos de participación en actividades terroristas".

"OBJETIVOS POLÍTICOS" DEL 11-M

Por lo que se refiere a las víctimas, además de reclamar que se incrementen las partidas destinadas a las mismas, el PP señala que "no debe establecerse ninguna distinción" entre los que sufren acciones terroristas, ya que todos ellos "merecen la misma consideración y respeto".

Respecto a los antecedentes del 11-M, el PP considera que que la comisión debe establecer "que no hubo imprevisión" respecto a la masacre, y que "se informó a las sociedad puntualmente y en tiempo real, y que se impulsó y apoyó la investigación policial sin interferencias".

Al mismo tiempo, el primer partido de la oposición entiende que el Congreso debería establecer como conclusión que los atentados de Madrid pretendían "objetivos políticos concretos". Asimismo, debería aludirse una "condena expresa" de las manifestaciones ante las sedes de PP celebradas el 13 de marzo, así como de los "actos vandálicos" sufridos por este partido.

En cuanto a la colaboración internacional, los populares entienden que los países deben modificar y reforzar sus mecanismos de prevención y represión antiterrorista, lo que debería verse complementado con un "plan europeo de prevención del terrorismo".