El nuevo formato debería estar consensuado con las comunidades autónomas que lo emiten y consistiría en un soporte plástico en el que debería figurar la denominación de la patología específica que padece su dueño.

Hasta ahora, este documento es emitido, previa solicitud del interesado, por las comunidades en soporte papel y en tamaño DIN A4. Este certificado es el que se tiene que presentar para acceder a las distintas prestaciones y beneficios sociales a los que tienen derecho los discapacitados.

El PP considera que sería positivo adoptar un tamaño "más manejable" y más fácil de conservar, por lo que solicitan la adopción del mismo formado de identificación de otros documentos oficiales como el DNI, el Número de Identificación Fiscal o la Tarjeta Sanitaria.