Rato, que presentó la ponencia económica que defenderá en la convención que el PP celebrará el próximo sábado en Madrid, afirmó que los Presupuestos del Estado de 1992 van "contra los intereses nacionales" porque provocarán, a su juicio, una caída en la inversión, el mantenimiento de la inflación y el aumento del desempleo.

El portavoz popular aseguró ue España podría alcanzar el PIB per capita medio de la CE en diez años si el Gobierno adoptase una política económica que incluyese la privatización de las empresas públicas, la reducción del tipo máximo del IRPF al 40 por ciento, menores cotizaciones empresariales a la Seguridad Social y el fomento del ahorro, entre otras medidas de competitividad.

Para el PP, sería posible obtener 450.000 millones de pesetas entre 1992 y 1993 vendiendo las empresas públicas rentables en los sectores de transportes,energía y comunicación, y dedicar ese dinero a potenciar las infraestructuras y reducir el déficit público.

Otras medidas defendidas por el PP, y que Rato propondrá al Congreso de los Diputados en febrero, son la regularización de balances, y la exención en el IRPF de los gastos de formación profesional, becas privadas e intereses generados por el ahorro, hasta un máximo de 200.000 pesetas anuales.

Rato responsabilizó a Felipe González de la "esquizofrenia" económica que supone haber aprobado uno Presupuestos del Estado para el 92 que, en su opinión, son contrarios al plan de competitividad presentado ante el Parlamento a mediados del 91.

A su juicio, González no sacó adelante el plan de competitividad porque creyó que el final de la guerra del Golfo iba a traer una recuperación económica capaz de hacer crecer a la economía española como en el trienio 1986-88.

Rato afirmó que "nunca unos presupuestos habían generado unas expectativas tan negativas como los de 1992", y se mostró convencid de que la política económica del Gobierno "ha pasado de ser la única posible a la única que no se puede aplicar".

Finalmente, consideró que el crecimiento de los precios en el 91, del 5,5 por ciento, no es un buen resultado, ya que ese año no se vio afectado como el 90 por los efectos de la guerra del Golfo. "Hemos ido hacia atrás en la contención de los precios", señaló, "y en el 92 la situación ne mejorará".