Los populares, "molestos" porque en el pleno del pasado ueves, día 12, Díez impidió que su líder tomara la palabra durante el debate de una proposición no de ley sobre los problemas de 90 familias de la colonia Urpisa, en Vallecas, "hemos decidido tomar cartas en el asunto", declararon fuentes del PP.

La propuesta del PP se resolverá mañana, martes, en la reunión de los Portavoces parlamentarios, convocados para aclarar el contencioso entre los bloques conservador y el de izquierda (PSOE-IU).

Jesús Pedroche, diputado del centro-derecha en la Asamblea,denunció, días atrás, que Pedro Díez está utilizando la presidencia como "instrumento al servicio del pacto" entre ambas formaciones de izquierda.

Por su parte, IU no calla ante las acusaciones de los conservadores y dice que Ruiz-Gallardón tuvo un comportamiento "antidemocrático y atropelló el funcionamiento de la Cámara".

El pleno del pasado jueves tuvo doble sesión: la matinal, para aprobar las conclusiones de la Comisión de Investigación sobre el caso Renfe, y la vespertina, destinada a los auntos ordinarios de cada jueves.

El último punto del orden del día fue el detonante que hizo estallar la tensión y los nervios de 10 horas de debates y discusión, con tres horas de descanso para comer.

La negativa de Díez a dar la palabra al líder del PP ocasionó el abanono de sus escaños por parte de los conservadores y un cruce de descalificaciones entre unos y otros, derecha y izquierda.