A su juicio, el informe del Tribunal de la Competencia que recomienda la supresión de las tarifas mínimas de los colegios (aunque no propugna la eliminación de la colegiación obligatoria) "es un nuevo pretexto al servicio de un objetivo: el desmantelamiento de los colegios profesionales".

"Es una ingenuidad pensar lo contrario, creer que no hay una relación causa-efecto entre las aspiraciones del Gobierno en relación conla colegiación y la resolución del Tribunal de Defensa de la Competencia", añadió.

Alvarez Cascos, que hizo estas declaraciones en rueda de prensa, defendió el papel de los colegios como "instrumento útil para prevenir muchos problemas de intrusismo profesional, que no llegan a ninguna instancia administrativa o judicial porque la barrera del colegio profesional es una buena garantía".

En su opinión, el Gobierno pretende sustituir las garantías deontológicas de los colegios profesioales "por sus ropias convenciones éticas y deontológicas, y al final la mejor llave para hacer saltar un candado es utilizar el recurso económico: quitarle el soporte económico que da vida a los colegios profesionales".

Finalmente, señaló que combatir la existencia de los colegios equivale a devaluar "la importancia del intrusismo profesional en el ejercicio de esas actividad y las garantías éticas que un profesional debe mantener ante sus clientes".