Según el portavoz del PP en la Comisión de Transportes de la Eurocámara, Luis de Grandes, tanto la directiva como el reglamento que han sido aprobados "suponen un grave perjuicio para el sector del transporte español".

El principal problema, según entiende el PP, radica en que se establecen unas pausas obligatorias de descanso que, en el caso de los conductores de largas distancias, no les permitirá pasarlos en casa.

Los camioneros más susceptibles de sufrir este problema son los que tienen su residencia en los países periféricos de la UE, como España, Portugal, Italia o Grecia.

"Los operadores españoles van a salir muy perjudicados porque no se tienen en cuenta sus intereses y así lo han expresado todas las organizaciones empresariales del sector", señaló De Grandes.