La campaña, que costará 230.000 euros, incluye la realización y producción de un anuncio, así como sus pases en televisión, radio y prensa. La campaña estará activa en las próximas 15 semanas, hasta el 15 de marzo, aunque el lema continuará durante toda la legislatura.

El diputado de Ciutadans en el Parlamento de Cataluña, Antonio Robles, señaló esta tarde a Servimedia que "el objetivo es fidelizar a los hablantes de lengua catalana para que siempre utilicen el catalán y, sobre todo, convertir al mundo inmigrante en catalanoparlante".

Según Robles, esta campaña tiene como base "la concepción de Cataluña como Estado, con una lengua propia, el catalán, la única lengua real y presencial". "El objetivo no es hacer ciudadanos competentes en la lengua, sino ciudadanos nacionalistas", dijo.

Para él, esta iniciativa "es un atentado contra el derecho a la pluralidad lingüística, va en contra del castellano, no sólo a favor del catalán, y pretende únicamente convertir a los inmigrantes en la vía de entrada al nacionalismo".

En esta línea, Robles explicó que a los nacionalistas "el victimismo les empieza a fallar" porque, según los datos, el 50,1% de ciudadanos en Cataluña tiene el catalán como lengua habitual y sólo el 44,1%, tiene el castellano. "Se ha dado la vuelta a la situación y ya no se pueden refugiar en ese victimismo histórico", dijo.

Por su parte, la presidenta del Partido Popular de Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, señaló hoy en declaraciones en la sede del PP catalán que "es triste que desde el tripartito se pierda el tiempo en discursos políticos que no interesan a nadie".

En su opinión, el Gobierno catalán debería de poner "todos los esfuerzos y recursos en intentar salir de una crisis económica que está afectando a las familias, a las pymes y a los autónomos catalanes".

Así, Camacho calificó la campaña como "el último ejemplo de despilfarro económico" y acusó al vicepresidente Carod "no sólo de despilfarrar dinero públicos en cuestiones que no son prioritarias", sino también de "entrar en el intervencionismo típico del tripartito en los usos particulares de los catalanes".