El Tribunal de Cuentas advierte de la ausencia de estos datosen un informe sobre las cuentas del PP de las Islas Baleares en los años 1989, 1991 y 1992, elaborado a petición de la Comisión Mixta Congreso-Senado.

Según la información publicada hoy por el citado rotativo, la entidad bancaria que gestionó el 90 por ciento de los recursos de entrada y salida del partido conservador de Baleares en el año 1991 y el 60 por ciento en el año 1992 sólo ha enviado los movimientos relativos a cuentas corrientes de las sedes locales del PP en el archipiélago, obviando los dtos correspondientes a aportaciones anónimas. Por ello el Tribunal de Cuentas concluye que la información es incompleta.

El informe sobre la contabilidad del PP de las islas en los años posteriores a la adjudicación del proyecto del Túnel de Sóller (noviembre de 1988) elaborado por la dirección nacional de la formación ya concluyó que el partido no había recibido comisiones, pero sí pudo haber percibido aportaciones anónimas no contabilizadas.

La adjudicación del proyecto del Túnel de Sóller por arte del Gobierno balear motivó la apertura de un proceso judicial que está pendiente de la celebración del juicio oral.

El ex presidente del ejecutivo Gabriel Cañellas dimitió en verano de 1995 como consecuencia de las dimensiones del escándalo. En las diligencias figura como encausado por los presuntos delitos de cohecho y prevaricación. Cañellas siempre ha negado que el PP (del que él era presidente) o dirigentes cercanos a la formación hubiesen recibido comisiones de la empresa adjudicataria.

Las investigaciones que figuran en el sumario se han centrado en la localización de 50 millones de pesetas de la compañía adjudicataria del Túnel de Sóller que fueron a parar a las cuentas del PP o de altos cargos relacionados con el partido.