En una rueda de prensa tras la reunión de la ponencia en la que quedó listo para ser votado en Comisión el Título II, relativo a las Instituciones en Cataluña, Trillo aseguró que su grupo ha defendido enmiendas "de rigor constitucional" a los casi cincuenta artículos que se vieron esta tarde, en un encuentro de casi tres horas.

"Nos encontramos con una marginación sistemática y una falta de voluntad absoluta por parte de los ponentes", denunció el ponente popular, lo que ha llevado a que no se introduzcan cambios en un título que este partido considera sensible.

Por su parte, Sáenz de Santamaría deploró que se mantenga la misma redacción del Consejo Audiovisual de Cataluña que en el texto original, con lo que "se ha avalado el blindaje" de un organismo con "facultades intervencionistas en medios de comunicación públicos y privados", lo que vulnera la libertad de expresión.

Agregó que el "Sindic de Greuges", tal y como ha quedado regulado, tendrá competencias exclusivas para las quejas en relación a la Administración catalana y local, lo que supone "una vulneración de las competencias del Defensor del Pueblo y una merma de los derechos y garantías de los ciudadanos catalanes".

Esto significa que los catalanes sólo podrán acudir al "Sindic de Greuges" y no al Defensor del Pueblo, lo que impedirá quejas como las que ahora se están produciendo, por ejemplo, en relación con la enseñanza en castellano, subrayó la diputada popular.

CENTRALISMO AUTONÓMICO

Además, denunció que el "Consejo de Garantías Estatutarias, que antes era consultivo, como existe en otras comunidades autónomas", tal y como se ha aprobado hoy es "un germen de un futuro Tribunal Constitucional en Cataluña, que incluso algún grupo a equiparado al Consejo de Estado francés".

Por último, en cuanto a la organización local, el texto aprobado supone "una vulneración de la autonomía de los entes locales en Cataluña", porque desde este Estatuto "se están definiendo las competencias, que vienen directamente de la Constitución, de los entes locales", en lugar de avanzar en la descentralización derivada del Pacto Local.

Concluyó que los "Consejos de Veguerías sustituyen a las diputaciones provinciales, una regulación contraria a la Constitución y mediatizando la autonomía local", lo que el PP interpreta como "una nueva fórmula de centralismo autonómico", con lo que se crea el germen de un sistema institucional que sobrepasa el autonómico.

El líder del PP en Cataluña, Josep Piqué, por otro lado, pidió que no se saquen "de contexto" las palabras del presidente de su partido, Mariano Rajoy, sobre la situación de la lengua castellana en Cataluña, que comparó con la del catalán en el franquismo.

"De la misma manera que en el franquismo, la lengua de la administración y de la enseñanza era el castellano, y en las calles se hablaban las dos lenguas, en el mundo oficial y administrativo y público se tiende hacia el monolingüismo", explicó. "Las situaciones son comparables, aunque no en términos globales", porque estamos en democracia y no en una dictadura.