En declaraciones a Servimedia, Urra opinó que en las manifestaciones posteriores al asalto no había necesidad de precisar si la menor había sido presuntamente agredida sexualmente. "Yo creo que eso es un error y tenemos que aprenderlo con este caso".

No obstante, el Defensor del Menor reconoció que, ante estos hechos "tan deleznables" de los que fue víctima l familia Castillo, se entiende que las primeras declaraciones que se hacen, con ganas de cargar la prueba de culpabilidad de un desalmado, se cuente que el asesino "ha degollado, ha tiroteado, ha abusado".

Evidentemente, añadió, el que hayan matado a una persona es noticia, pero, "¿ha lugar a decir que una niña ha sido presuntamente abusada sexualmente?", se preguntó. "Yo creo que decirlo públicamente es un grave error", insistió.

"Haya pasado o no haya pasado sus amigos y todo el mundo le pregunan, y eso estigmatiza. Eso lesiona a una niña, esas cosas hay que probarlas y demostrarlas. Hay que ser cuidadoso", advirtió. "Hay que compaginar lo que es una noticia con lo que es el respeto a los niños".

Por otra parte, el Defensor del Menor, que ha estado en contacto continuo con las menores desde que ocurrieron los hechos, adelantó que ambas van a necesitar la atención de un psicólogo de continuidad, "al margen de que el mejor terapeuta que tienen en este momento son ellas mismas, el apoyo de unaen la otra, de la familia y de los grupos de amigos, que lo están haciendo muy bien, manteniendo un anonimato que es absolutamente necesario en este momento".

"Sí necesitarán un psicólogo de continuidad. Esto es un daño que puede crear trauma, una sombra, miedo, una fobia, y eso hay que trabajarlo en el tiempo. La noticia desaparece, la realidad se mantiene porque el daño está hecho", aseveró.

Al margen de este hecho, el Defensor quiso felicitar a los medios de comunicación por el trato que se esá dando a los menores. "Con el tiempo se va ganando en sensibilidad y, en conjunto, las cosas se están haciendo bastante bien", concluyó.