La planta se llamará Girassol, tendrá capacidad para abastecer a 21.000 hogares y producirá 62 megavatios. Su tamaño será 12 veces el de la mayor central solar que existe hasta ahora: la de Leipzig en Alemania.

La construcción de la central tendrá un coste estimado de 250 millones de euros, y el consistorio de Moura correrá con un 90% del riesgo financiero del proyecto.

Con la entrada en funcionamiento de Girassol, prevista para 2009, la energía solar, cuya producción hasta ahora era escasa en el país vecino, podrá empezar a competir con la eólica, como generador de energía renovable a gran escala.

Sin embargo, la planta tendrá un importante impacto visual en la zona, donde ocupará un total de 112 hectáreas, el equivalente de 150 campos de fútbol, con 350.000 paneles solares.

La licencia para la estación de Moura está aún pendiente de aprobación por parte del Ministerio de Industria portugués quien también deberá fijar el precio del kilovatio de energía eléctrica limpia en el país.