Insistió en que la posible alarma creada por la contaminación con dioxinas de alimentos belgas no está justificada en estos momentos y explicó que para volver a sacar al mercado estos productos deberán contar con el certificado emitido por el Gobierno belga o pasar por una analítica.

Romay, que compareció hoy a petición propia y de los grupos socialistas e IU ante la Comisión de Sanidad y Consumo para explicar la actuación del Gobierno durante la crisis de las dioxinas, tranquilizó hoy a l población sobre las medidas adoptadas por el Gobierno español, "incluso anticipándose a las directrices marcadas por la Unión Europea".

Rechazó las críticas formuladas por los diputados Jaime Blanco (PSOE) y Angeles Maestro (IU) sobre la descoordinación que existe entre las comunidades autónomas y el ministerio en materia de Salud Pública, afirmando que en todo momento estuvieron en contacto con las consejerías de Sanidad y con la UE.

La coordinación entre las instituciones del Estado se potencirá, a su juicio, con la creación de la Agencia Española para la Seguridad Alimentaria, que velará por la seguridad de los alimentos y coordinará la actuación de las distintas administraciones, proporcionándoles el asesoramiento científico que requieran.