Un inspector de policía que se hizo pasar por el director de la sucursal logró desarmar a los atracadores que se habían hecho fuertes en el interior de la entidad tras apoderarse de los dos rehenes.

Los atracadores, dos jóvenes de 15 y 18 años, penetraron en la entidad bancaria de madrugada, forzando una ventana, y aguardaron la llegada de los empleados, que empezaron a incorporarse al trabajo a partir de las ocho de la mañana. Tras amenazarlos con una pistola Astra, los atracadore retuvieron como rehenes a una empleada, Cristina Giner y al cajero del Banco Popular.

La policía, alertada por los vecinos, rodeó el edificio y acordonó la zona, mientras numerosos vecinos de Quart de Poblet se acercaron a las proximidades de la entidad bancaria para seguir de cerca el atraco.

los atracadores solicitaron la presencia del director de la entidad, Joaquín García, ya que sin él no podían abrir la caja de sistema de apertura retardada. La policía acordó con ellos que el propio directr les suministraría unos bocadillos y bebidas que también habían pedido.

Sin embargo, fue un inspector de policía quien, haciéndose pasar por el director, proporcionó los bocadillos a los atracadores e instantes después consiguió desarmar al que llevaba la pistola.

Inmediatamente, los numerosos policías armados con pistolas y armas de repetición que esperaban en el exterior del edificio penetraron en tropel, redujeron definitivamente a los atracadores y liberaron a los dos rehenes.

A esa hor la empleada Cristina Giner dialogaba en directo con Luis del Olmo, en el programa 'Protagonistas' de Onda Cero Radio (OCR). La empleada intentó sin éxito que uno de los atracadores se pusiera al teléfono y segundos después se cortó la comunicación y los policías entraron en la sucursal. Antes se pudieron oir los gritos de Cristina y una voz de "al suelo, todos al suelo".

Benjamín, el cajero de la entidad, aseguró cuando todo había acabado que era la tercera vez que le ponían una pistola en la nuca, ua experiencia que "hay que vivirla para saber lo que es".

La empleada Cristina Giner dijo que los atracadores eran "dos niños", que no estaban nerviosos y que sabían que era necesaria la presencia del director de la sucursal para conseguir el botín.

Los dos atracadores, Juan León A.Z., de 18 años, y Agustín S.S., de 15, fueron trasladados posteriormente a la comisaría de Quart de Poblet y pasarán posteriormente a disposición judicial. En el atraco utilizaron un automóvil robado a un vecino de Casielfabib (Valencia), en el que pensaban huir posteriormente.