El párroco avisó a la centralita del 091, debido a la situación de abandono de las dos niñas, según informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

Según explicaron posteriormente las pequeñas, que fueron trasladadas al Grupo de Menores (GRUME), escaparon de su casa por los malos tratos que recibían de sus familiares y decidieron ir a Madrid para buscar a una amiga, cuya dirección desconocen.

A las siete y media de la tarde de ayer tomaron un autobús y llegaron a la capital, done estuvieron deambulando sin rumbo fijo hasta llegar a la zona de Atocha. Finalmente, entraron en una iglesia y explicaron al sacerdote la situación en que se encontraban.

Los funcionarios del GRUME citaron a la madre para tramitar las correspondientes diligencias. Por su parte, el juez dispuso que las dos niñas fueran entragadas a ésta.

Por otra parte, un policía nacional que estaba de guardia en la comisaría de Fuenlabrada recogió esta madrugada a un menor que vagaba por la calle. El chico, queaparenta unos 12 años, sólo supo decir su nombre y que es portugués.

Al igual que en el caso anterior, el pequeño fue llevado al GRUME y, desde allí, a un colegio de la Comunidad de Madrid. El niño desconoce dónde están sus padres, que carecen de domicilio fijo.