UN POLICIA NACIONAL DE IRUN, CONDENADO A 12 AÑOS DE PRISION POR TRAFICO DE DROGA

SAN SEBASTIAN
SERVIMEDIA

La Sección primera de la Audiencia Provincial de San Sebastián condenó al Policía Naional de Irún, Emilio del Prado, a doce años de prisión, una multa de 150 millones de pesetas y 10 años de inhabilitación por un delito de tráfico de cocaína.

La sentencia señala que el policía cambió la droga que le habían proporcionado tres traficantes por otra de menor pureza y menor peso.

Junto a Del Prado fueron también condenados Juan Carlos Mendizábal, Emilio Guerra y Javier Imaz, los tres traficantes a los que se les imputan penas de 8 años y un día de prisión mayor, para cada uno de ello y una multa de un millón de pesetas.

Asimismo, condenó a Daniel Vergara a 6 meses de arresto mayor y una multa de medio millón de pesetas, al considerarle cómplice.

Según los hechos probados que describe la sentencia, el mes de mayo de 1992, el policía propuso a Mendizabal, que le proporcionase un kilo de cocaína por un valor de 5 millones de pesetas y que de su venta se repartirían los beneficios entre ambos, ante lo cual, y poniéndose en contacto con el resto de los inculpados, consiguió la sutancia estupefaciente.

A su vez, Del Prado comunicó a los inspectores de la Brigada de Información de la comisaría de Irún donde trabajaba, que un individuo le había ofrecido participar en una operación con un kilo de cocaína. Después de este encuentro, el policía mantuvo otras reuniones con algunos superiores pero no siguió el curso habitual que se suele utilizar para notificar delitos de este tipo.

La resolución judicial manifiesta que el 4 de julio Mendizabal, junto a Guerra e Imaz, acudieron asta la vivienda de Del Prado para entregarle un kilo de cocaína de gran pureza, ante lo cual, el agente cogió la droga, cerró la puerta de su domicilio donde cambió la sustancia por otra de menor pureza y peso.

Cuando salió de nuevo al rellano de la escalera, Emilio del Prado detuvo a los tres individuos con la ayuda de un compañero al que había llamado con el pretexto de que le diera un mensaje.

A pesar de que, durante el juicio el agente aseguró que él no había cambiado la droga y que dos de ls acusados lo corroborasen, cambiando así su testimonio inicial, la sentencia estima que la declaración de ambos acusados obedece a un intento de evitar el agravamiento de la condena ya que la droga del paquete inicial era de "notoria importancia".

Finalmente, el Tribunal considera que la operación de narcotráfico fue pensada y ejecutada por el propio polícía.

(SERVIMEDIA)
06 Jul 1993
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