Los nuevos agentes debern hacer un curso formativo de un mes para adaptarse a la realidad gallega y a las instituciones de autogobierno en las que prestarán servicio, tanto en vigilancia de edificios públicos como en labores de investigación y vigilancia pesquera o de incendios forestales.

Según declaró a Servimedia el director de la Academia Galega de Seguridad, Juan José Fariñas-Ferro, los nuevos agentes harán este curso durante el mes de marzo y en abril se incorporarán a sus nuevos destinos, en La Coruña, Lugo, Orense y ontevedra.

Estas unidades de polícía adscrita tendrá delegaciones en las cinco principales ciudades gallegas, tras un año en que sólo hubo una compañía con base en Santiago de Compostela.

Para poner en marcha las sedes territoriales,la Xunta invierte este año unos 180 millones de pesetas, a través de la Consejería de Justicia e Interior. El año pasado, al no existir este departamento, dependían de la Consejería de la Presidencia.

La policía autonómica gallega se constituyó con la adscripciónde una compañía de la Policía Nacional, que desde este año serán dos. Los agentes carecen de uniforme propio y sólo incorporan a su vestuario un escudo de Galicia. Xunta e Interior se reparten el coste de esta unidad, que depende administrativamente del Gobierno gallego.