En una rueda de prensa conjunta en el Congreso de los Diputados, los tres grupos explicaron sus propuestas y anunciaron que cada uno va a respaldar los votos particulares del resto, en los que existen dos reprobaciones al Ejecutivo popular, por parte de ERC y el Mixto, y una petición de "responsabilidad moral y política" del PNV.

El portavoz del PNV en la Comisión, Emilio Olabarría, explicó que no pide que se repruebe al anterior Ejecutivo porque considera que este "instrumento parlamentario beligerante para un grupo ya castigado por la ciudadanía privándole del Gobierno no es el más adecuado".

En cambio, sÍ pide responsabilidades, sin consecuencias jurídicas, al ex presidente del Gobierno, al ex ministro del Interior Ángel Acebes, al entonces secretario de Estado de Seguridad Ignacio Astarloa, y al portavoz del Gobierno Eduardo Zaplana, por su "grosera manipulación de la realidad".

Recordó que en 54 ocasiones el Gobierno popular imputó a ETA los atentados "por fines electorales en el sentido más bastardo de la expresión", porque sabía que el "inconsciente colectivo" le daría mayoría absoluta en caso de que fuera esa banda, pero lo relacionaría con Iraq si sabía que el responsable era el terrorismo islamista.

En su voto particular, el PNV también incluye medidas no incluidas en el texto consensuado en relación a las víctimas, como la reforma de la Ley de Solidaridad con las Víctimas del Terrorismo para que accedan a las subvenciones en las mismas condiciones que las de ETA, pero especialmente para que no se les "manipule" y utilice para "alimentar la agresividad" partidaria.

También reclama más control de los explosivos, para lo que puso como ejemplo la vigilancia que se da en Euskadi; la implicación de las Policías Autonómicas, la especialización de en la Audiencia Nacional y el cese del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, que considera "inhábil" para estos casos por su desconocimiento.

DEGRADACIÓN DEL PACTO

En cuanto a las comisiones de investigación, indicó que se ha manifestado una "degradación" de las mismas porque se ha debatido más acerca de los motivos de haber perdido o ganado las elecciones, lo mismo que ha ocurrido con el Pacto Antiterrorista, que debe tener una nueva arquitectura e incluir a todos para ser "inequívocamente democrático".

El comisionado de ERC, Joan Puig, explicó que en su documento, tras la explicaciones de los hechos, incluye 11enmiendas y varias propuestas que no son contradictorias, sino que complementan el dictamen. Además, pide que se elimine el punto que logró introducir el PP como un "gol colado por la escuadra" con su teoría de la relación de ETA y Al Qaeda.

Entre sus propuestas, mencionó la creación de un observatorio a favor de la reconociliación; auditorías sobre la trama de los explosivos, la colaboración de la UCO y otras secciones de la Guardia Civil, y la relación de los confidentes y los terroristas.

DEROGACIÓN DE LA LEY DE PARTIDOS

Por otro lado, pide la derogación de la Ley de Partidos y del Pacto Antiterrorista, para configurar un acuerdo único contra el terrorismo en base a las palabras del propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el sentido de que "el fin de la violencia necesita de la política".

En cuanto a las responsabilidades políticas, pide la reprobación de Aznar, Acebes, Zaplana y Ana Palacio, "por el ridículo que hizo" al forzar una condena a ETA en la ONU cuando se sabía que no era autora del atentado, y exigió a todos ellos una "disculpa".

Estos mismos ex responsables del Gobierno son los que quiere reprobar el Grupo Mixto, tal y como explicó José Antonio Labordeta, quien denunció la "falta de previsión" y la política de información "engañosa", además del "desastre de la política exterior" y la desorganización del Ministerio de Interior cuando el PP llevaba ocho años gobernando.