En rueda de prensa después de la Junta de Portavoces, Esteban insistió en su tesis, ya expuesta anoche en las redes sociales, de que el TC, al suspender la tramitación de su propia reforma, protagonizó “una invasión de la inviolabilidad que tiene la Cámara”, de la “soberanía parlamentaria dentro de su capacidad de autoorganización”, y de que los magistrados con el mandato caducado “deberían haberse abstenido; todos, no sólo los recusados”.

No obstante, el portavoz vasco también admitió que “ha habido muchas prisas, falta de rigor”, y mucho “mezclar temas”, pero recordó que lo han hecho todos los Gobiernos. “Yo no lo hubiera hecho así, pero precedentes los hay”, confesó.

En suma, se declaró “un tanto sorprendido” y atribuyó el bloqueo “absolutamente incomprensible” de los órganos constitucionales a que “hay intereses de unos y otros”, y auguró que ahora “se presentará una proposición de ley que partiendo de cero haga las modificaciones que han quedado suspendidas”.

Así se corregirá el que el PSOE no previera que el PP podía “llevarlo a ese extremo”, aunque a la vez Esteban valoró que no había “necesidad de meter todo en una iniciativa, como si el mundo se acabara el 31 de diciembre”.

Finalmente, el portavoz del PNV desaconsejó llamar a movilizaciones en la calle, como han sugerido ciertos portavoces de izquierda. “Algunos incluso están buscando eso, a los promotores del recurso les vendría bien que se contestara a nivel de calle”, avisó, confesando que él no ve el sentido de esas movilizaciones cuando se trata de “un escollo perfectamente superable” con una nueva proposición de ley.