En su opinión, hay que dar un margen de confianza a este plan, "sobre todo porque es el primero" y es bueno que haya una política institucional sobre voluntariado, teniendo en cuenta además que "es algo que la sociedad está pidiendo".

En cualquier caso, Sánchez aseguró que el plan es "como un marco que ahora tenemos que ejecutar las organizaciones", pero hay que "estar alerta para ver cómo evoluciona y poder plantear los elementos correctivos que seguro van a surgir con el tiepo".

Sobre la decisión tomada también por el Consejo de Ministros de remitir a las Cortes el proyecto de ley de Cooperación Internacional, Sánchez se mostró optimista y manifestó su confianza en que se definan los conceptos. Y quede clara la diferencia, por ejemplo, "entre cooperación y comercio, o las coberturas sociales que puede tener un cooperante después de estar cuatro o cinco años trabajando con una ONG en cualquier país del mundo".