González Pons viene destacando en los últimos días la diferencia de criterios existente entre los gobiernos socialistas de Castilla-La Mancha y Extremadura y la dirección del PSOE en relación con el plan del Gobierno. La última muestra la ofreció en el pleno del Senado de ayer, martes, al constatar que los socialistas catalanes, adscritos a un grupo distinto (Entesa), opinaban diferente del Grupo Socialista en materia de rasvases.

Laborda convocó hoy a los periodistas para, en tono airado, denunciar "por inapropiada" la estrategia de González Pons de "intentar zaherir a los socialistas" de forma permanente.

"Esa devoción (de González Pons) por (Javier) Arenas", dijo Laborda, "le lleva a cometer un error muy grave que involucra al Gobierno, que es que, en lugar de defender las virtudes del Plan Hidrológico del Gobierno, se dedique a insultar a los socialistas y a Rodríguez Zapatero".

En su opinión, el portavo popular "debería de hacer un gran esfuerzo y estar preocuado, porque ese plan no tiene más votos que los de Coalición Canaria, que por cierto está representando un territorio muy poco afectado por el mismo, y en tener presente que no hay ningún gobierno en el mundo que pueda sacar un plan así sin consenso".