Siempre según las mismas fuentes, se le imputa un presunto delito de pertenencia a banda armada, consistente en facilitar infraestructura al GSPC. Se trata de Yasin Sediki, Mohamed Bualem Juni, alias "Abdalá"; Hakim Zerzur, Hocin Juni, Mohamed Belaziz y Mavid Sahuan, detenidos respectivamente en Lepe (Huelva), La Mojonera (Almería), Águilas (Murcia), Canals (Valencia), Tudela y Pamplona (Navarra).

Todos ellos negaron cualquier vinculación con el GSPC y aseguraron que eran inmigrantes que se ganaban la vida en España, aunque, según las fuenes consultadas, ninguno de ellos supo explicar bien a qué se dedican profesionalmente.

A ninguno de ellos se les preguntó por Osama Bin Laden, puesto que no se les investiga por eso, sino por su presunta pertenencia a una rama internacional del GSPC, a la que la Audiencia Nacional lleva investigando dos años.

Una de las cosas que la juez ha tenido en cuenta a la hora de decretar la prisión incondicional para estas seis personas son las conversaciones telefónicas grabadas por la policía con dos suuestos dirigentes del grupo detenidos el pasado 13 de septiembre en Holanda (Jerome Courtellier) y en Bélgica (Nizar Trabesi). Ninguno de los seis detenidos reconoció su voz en las cintas magnetofónicas.

A pesar de que el pasado 21 de septiembre Bélgica envió una comisión rogatoria a España solicitando la detención de estas seis personas, lo cierto es que las autoridades de dicho país no se han puesto aún en contacto con las españolas tras la operación contra el GSPC, según las mismas fuentes.

Esas seis personas fueron detenidas este miércoles junto con otras diez personas más, de las que 7 fueron puestas en libertad por los propios agentes policiales y otros tres más por la juez Palacios, al no tener vinculación alguna con el GSPC.