Noval hizo estas declaraciones en el Congreso tras recibir hoy la negativa del presidente de la Cámara Baja, Federico Trillo, a su petición de que compareciese el Gobierno para explicar su última decisión sobre el caso Pinochet: no recurrir la pretensión del ministro del Interior británico, Jack Straw, de poner en libertad aldictador chileno por motivos de salud.

"Vemos con claridad que el Gobierno se ha quitado definitivamente la careta. Ahora entendemos, y millones de españoles lo entienden con nosotros", dijo Noval, "que el Gobierno nunca tuvo interés en defender los intereses de las víctimas, de los desaperecidos, entre los que hay españoles".

Aún fue más allá en sus acusaciones el portavoz socialista al asegurar que "Aznar va a pasar a la Historia como el único jefe de Gobierno europeo que no ha dicho una sola plabra crítica sobre un personaje genocida como es Pinochet. Se le han escuchado idas y venidas, argumentos y subterfugios, pero no se le ha escuchado a lo largo de estos meses al jefe del Gobierno español una sola palabra de rechazo de las acciones criminales de Pincohet en su país".

Noval criticó al Ejecutivo por aspectos concretos relacionados con el caso. "Utilizó a los fiscales", dijo Noval, "para tratar de impedir el desenvolvimiento de la acción judicial; envió un espía diplomático al Reino Unid a entrevistarse con la Fiscalía británica, sin que en este momento todavía sepamos en qué consistieron aquellas conversaciones; engaño al Gobierno chileno, que mostró quejas respecto del comportamiento de nuestro Gobierno bien en contraposición con la buena opinión que se le escuchó respecto del Gobierno inglés, y finalmente, es el Gobierno español, para oprobio de millones de españoles el que pone los medios necesarios para que Pinochet quede impune".