En un artículo que publica en el último número de la revista de orientación guerrista "Temas", Torres señala que el Gobierno se ha limitado a tramitar la petición de extradición de Pinochet, practicando su habitual 'dontancredismo', eudiendo en todo momento pronunciarse sobre el fondo de la cuestión, ni ir más allá de reiteradas manifestaciones formales de respeto a las resoluciones judiciales, que resulta obvio en un Estado de Derecho, sin una sola expresión de repudio hacia el dictador, ni de solidaridad con las víctimas y sus familiares, o de respaldo al proceso democrático chileno".

"Al tiempo", añade, "se ha utilizado al Fiscal General del Estado y a la Fiscalía de la Audiencia Nacional -forzando los límites del mayor ridícul conocido hasta el moento entre sus muchas actuaciones extravagantes- para justirficar el golpe de Estado y entorpecer empecinadamente, contra toda razón jurídica, el curso normal del procedimiento".

En su opinión, "se ha hecho perder a España la ocasión de aparecer ante la comunidad internacional como protagonista en la defensa de las víctimas de un régimen execrable como aquél, fueran o no españolas, al tiempo que con su doble discurso y las iniciativas contradictorias adoptadas subrepticiamente, seha agraviado a la vez a toda las partes involucradas y se han puesto en serio riesgo nuestros intereses políticos y económicos en Chile. Un éxito en todos los frentes".