Pimentel precisó que, independientemente de esta desgracia, los datos de siniestralidad laboral en España mantienen un "ritmo macabro" que es "incompatible" con un Estado moderno.

Según los datos hechos públicos ayer conjuntamente por los sindicatos CCOO y UGT, en el primer cuatrimestre de 1999, un total de 382 trabajadores perdieron la vida en accidentes laborales, un 13,69 por ciento más que en el mismo periodo del año pasado.