En declaraciones a la Cadena Ser, Mullor acusó a los pilotos de haber truncado una exitosa estrategia de crecimiento de Iberia, que le había llevado a conquistar cuotas de mercado que antes dominaban sus competidores, y recordó que, ya tras la huelga del 99, "nos costó ocho meses recuperar las cuotas en las que estábamos alprincipio".

Mullor aseguró que los pilotos mantienen "una posición propia de funcionarios, pero no de funcionarios que trabajan en los ministerios, sino de los que han tenido las ventajas de los funcionarios y ninguno de sus inconvenientes".

Según explicó, los pilotos "han negociado históricamente sin que les importara la situación económica de la compañía, porque siempre ha estado detrás el presupuesto nacional, que era el que al final acababa pagando sus sueldos".

Respecto a la posibilidadde una intervención de la Administración, Mullor dijo que "en España es díficil plantearse ese tema porque no hay una legislación que ampare ese tipo de prácticas. No creo que la Administración pueda hacer más de lo que está haciendo".