Los lugareños de este pueblo serrano esperan todos los años a que llegue el martes de carnaval (que este mes se celebra el día 23 de febrero) para participar en esa fiesta popular.

Durante aproximadamente una hora y media un burro pasea por las calles del pueblo a una persona que simula ser un reo y que porta un cartel en el que está escrita la sentencia.

Desde hace varios años, diversas organizaciones anmalistas expresan su oposición a esa celebración, por considerar que el animal sufre maltratos innecesariamente.

Este año, "The donkey sanctuary" ha enviado cartas a los villanovenses para que excluyan al burro de la fiesta y evitarle así sufrimientos, ya que aseguran que el año pasado el animal cayó al suelo en veinte ocasiones durante el recorrido debido a la presión que ejerce la multitud que acompaña al cortejo.

La Asociación para la Defensa de los Derechos del Animal (Adda) ha apoyado la solcitud y el próximo día 23 enviará un observador a Villanueva de la Vera para realizar un seguimiento de los acontecimientos.

"MALTRATO PSIQUICO"

Carmen Méndez, portavoz de Adda, explicó a Servimedia que "el burro sufre un maltrato psíquico, más que físico, porque un grupo numeroso de personas lo acorralan durante el trayecto".

Según Carmen Méndez, si el asno no sufre daño físico "es consecuencia de las campañas de denuncia que venimos desarrollando, porque al principio moría o quedaba muy maltrcho".

Sin embargo, el alcalde de la localidad, Antonio Caperote, niega esas acusaciones y mantiene que el animal no sufre ni es maltratado.

Hasta hace unos años, el burro lo prestaba un vecino, pero debido al proceso de desaparición que sufre la especie en los pueblos de la comarca, el ayuntamiento compró un asno hace cinco años, para que realice el recorrido.

Antonio Caperote criticó la actitud de la asociación inglesa contra esa tradición popular que tiene una antigüedad superior a los 40 años, y sugirió a los responsables británicos "que acaben con el maltrato de los animales en su propia nación".

"Ellos", dijo, "tienen su caza del zorro o las carreras de caballos en las que terminan reventados y, sin embargo, intentan venir a darnos lecciones de cultura o educación".

El alcalde de la localidad cree que el origen "injustificado" de esta polémica radica en la campaña pro-animalista que hace unos años protagonizó la actriz Brigitte Bardot.