Según Committed2Equality (C2E), organizacióncreada para examinar el funcionamiento de las leyes antidiscriminación, 3.000 compañías de más 250 trabajadores -lo que equivale a un 77% de la cifra total de grandes empresas empresas del Reino Unido- están incumpliendo estas normativas.

"La única manera de hacer que las empresas cumplan las normas es retirarles los contratos públicos, y es lo que debería hacer un gobierno comprometido con el empleo de los grupos más vulnerables", subrayó Janet Lakhani, presidenta de C2E.

Sin embargo, las empresas británicas harían bien en subsanar esta situación, ya que el año que viene podrían tener que pagar 526 millones de euros en sanciones e indemnizaciones por discriminación, una cifra que no deja de crecer desde el año 2002, en el que ascendió a 219 millones de euros, debido a las nuevas leyes y al incremento de las denuncias por este motivo.