Según el relato de los hechos realizado por el fiscal, Conde Ingelmo acudió al domicilio de su segra para conseguir dinero para comprar droga, puesto que tanto él como su mujer eran toxicómanos. En el trancurso de una encendida discusión que mantuvieron ambos, el acusado esgrimió un cuchillo y apuñaló 18 veces a la mujer, que falleció en el acto.

El fiscal hace hincapié en que Natividad Arza, de 70 años, mantenía a su hija, por carecer el matrimonio de recursos económicos. Todas las semanas, la víctima del asesinato les daba 15.000 pesetas. La mala relación entre suegra y yerno queda patente en l testamiento de la mujer, que especifica que éste no recibirá nada del dinero que deja a su hija.

Mientras el acusado niega los hechos, su abogado pide la absolución de su patrocinado por no existir pruebas directas que le involucren en el asesinato. Por su parte, la acusación particular pide 30 años de prisión.