El secretario general de esta patronal, Carlos Díz, aseguró a Servimedia que el balance de la devaluación es "equilibrado" para el sector hotelero, pero no claramente beneficioso.

Reconoció que el realineamiento de las monedas del SME atraerá más turistas a España, lo cual beneficiará fundamentalmente a los hoteles de playa, pero a cambio dificultará el negocio hotelero en el interior de España y en las ciudades.

La afluencia de españoles a los hoteles -el 60 por ciento del total- también se verá disminuida al disminuir las pernoctaciones de lo hombres de negocios y las asistencias a ferias, debido a la peor situación económica del país y a la inestabilidad política.

Díaz calificó de "deplorable" la imagen que España está proyectando en el resto de Europa y acudió al caso italiano en 1994, cuando cayó de forma alarmante el turismo por la situación política, para advertir de un posible efecto similar en España.

El secretario de la Federación de Hoteles indicó también que el aumento de turistas no siempre conlleva un aumento de ingresos,por los posibles incrementos de los costes, y dijo que su patronal apuesta por un turismo de calidad frente a uno en que prime solamente la cantidad.