Según Montoya, tanto los armadores como los pescadores afectados por estas paradas viven en una permanente incertidumbre, ya que ni siquiera saben si recibirán indemnizaciones económicas por la inactividad.

La presente parada biológica, que se prolongará durante un mes, afecta a 57 pesqueros pesqueros cn base en puertos andaluces, principalmente de las localidades gaditanas de Algeciras y Tarifa, y a otros 37 de Galicia. Estas embarcaciones, que faenan habitualmente en los caladeros marroquíes, tienen licencia para la modalidad de palangre.

La parada biológica tiene por finalidad permitir la regeneración y conservación de los caladeros marroquíes, que, según las autoridades de ese país, están "saturados".