LAS PERSONAS CON SINDROME DE DOWN PIDEN AUTONOMIA PARA DECIDIR LO QUE QUIEREN SER EN LA VIDA
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Más de 500 personas, 120 de ellas con Síndrome de Down asistieron anoche en Cáceres a la inauguración del IV Encuentro Nacional de Familias de Personas con Síndrome de Down, acto en el que la vicepresidenta de la Federación Española de Instituciones Síndrome de Down (FEISD), Juana Zarzuela, pidió que las personas con síndrome e Down puedan decidir por sí mismas, con autonomía e independencia, lo que quieren ser en la vida.
En su intervención, Zarzuela explicó que "ese es el nuevo reto que tenemos. Ya no hablamos si las personas con síndrome de Down pueden o no hacer determinadas actividades. Ahora pedimos la normalización de sus vidas, es decir, que puedan tomar sus propias decisiones.
Asimismo, solicitó la plena participación social de las personas con síndrome de Down y que las familias dispongan de los medios adecudos para alcanzar estos objetivos.
El acto de inauguración estuvo presidido por el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que ha recibido uno de los Premios Trébol a la Solidaridad que entrega FEISD a instituciones y personalidades que han contribuido a mejorar la calidad de vida de las personas con síndrome de Down.
En el acto, Ibarra pidió que se normalice la situación de todas las personas discapacitadas, aunque mostró cierto temor a esa "normalización porque a vees la normalización puede llevar a la indiferencia".
"Estamos pasando de una situación de oscurantismo a otra de exhibición normalizada. Las personas con discapacidad y las personas con síndrome de Down son personas que deben normalizar su presencia en la sociedad pero sin dejar de ser diferentes, aceptando las consecuencias de esas diferencias, como la financiación extraordinaria de proyectos para su plena integración", subrayó el presidente de Extremadura, quien agradeció el premio porque, según él,es una buena persona.
Los otros dos premiados con el Trébol a la Solidaridad fueron el fotógrafo Roberto Villagraz (cuyo premio fue recogido por su viuda Concepción Tejedor) por saber descubrir las miradas de las personas con síndrome de Down y su realidad; y el presidente de Caja Extremadura, Jesús Medina, por la labor de apoyo que su institución ha dedicado a las personas con síndrome de Down.
En el transcurso de la inauguración María Expósito, joven con síndrome de Down, pidió las mismas oportnidades que el resto de personas para desarrollar una vida con calidad. "Sabemos que tenemos limitaciones pero tenemos facultades, podemos llegar quizá unos segundos después que el resto, pero llegamos", sentenció María Expósito.
Por su parte el presidente del CERMI Extremadura, Manuel López, dijo que la discapacidad debe ser considerada como eje transversal de todas las políticas. Y echó en falta una Ley de No Discriminación en España.
"Espero que en este 2003, Año Europeo de las Personas con Dicapacidad se apruebe esta ley", dijo Manuel López, quién considera fundamental el facilitar el acceso al empleo para las personas discapacitadas como medio de integración social. En este sentido alabó el borrador de empleo de la Junta de Extremadura, que amplía el porcentaje de empleo público para discapacitados al 5%.
Por último, el presidente de la Asociación Síndrome de Down Extremadura, Antonio Ventura, solicitó desterrar las actitudes mendicantes de la sociedad hacia las personas con discapacidady abogó por practicar un nuevo humanismo en el que quepa todo el mundo.
En el acto de inauguración, que se celebró en el Complejo Cultural San Francisco de Cáceres, intervinieron también el obispo de Coria-Cáceres, Ciriaco Benavente; la vicepresidenta del CERMI Estatal, Maite Lasala; el director de Accesibilidad de la Fundación ONCE, Jesús Hernández; el presidente de la Diputación de Cáceres, Antonio Caperote; y el alcalde de Cáceres, José Antonio Saponi.
(SERVIMEDIA)
05 Abr 2003
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