El decreto de libre elección de médico de cabecera o de pediatra, aprobado el pasado viernes por el Gobierno, no provocará, según Conde, un desajute en las áreas básicas de Atención Primara "porque su oferta de servicios es uniforme".

"Ciertamente", añadió, "el decreto vincula la elección del médico de cabecera con el área hospitalaria en la que trabaja el facultativo, pero no creemos que desequilibre las diferentes áreas de salud".

El subsecretario recordó que la norma aprobada potencia el carácter privado de la relación médico-paciente, desarrolla dos artículos de la Ley General de Sanidad y supune un elemento incentivador para los profeionales de la sanidad.

Los médicos de cabecera y pediatras cobrarán unas cantidades fijas, dependiendo del tipo de zona en la que trabaje, la edad de sus pacientes y la dispersión de la población, más una cantidad por cada paciente hasta un tope de 2.000 por facultativo.

La normativa prevé que el médico pueda rechazar la inclusión en su lista de otros pacientes, una vez que ha alcanzado las 2.000 personas, aunque podrán ampliar su cupo hasta un 20 por ciento más con la aprobación de la InspecciónMédica.

José Luis Conde aseguró que el deparamento de Sanidad estudia la ampliación de la libre elección a los especialistas en Ginecología y en atención de los partos, "situación en la que la relación paciente médico es más estrecha".

Por su parte, el nuevo director general del Insalud, José Luis Tenes, dijo que la tarjeta individual no será imprescindible para pedir el cambio de médico, ya que podrá utilizarse el resguardo de la solicitud de la tarjeta.

"A 31 de julio de este año", explicó "el 76 por ciento de la población del territorio gestionado por el Insalud ya contaba con su tarjeta y se espera que en diciembre de este año alcance al 82 por ciento de todos los beneficiarios".