Calvo, estudiante de Derecho y parlamentario en la Asamblea de Madrid desde las últimas elecciones de 1991, animó a los casi 700 delegados "a un compromiso responsable de presente y futuro para el país. Ahora no se hace política, sino que se hacen y deshacen circunstancias, y la alternativa pasa por los jóvenes".

Tras ser elegido presidente de NNGG, Pedro Calvo insistió en que Nuevas Generaciones debe ser "el máximo exponente de una nueva actitud social y política que tenga como base u profundo compromiso ético".

Calvo confió también, en referencia al Partido Popular, en que se convierta en "una formación política de vanguardia, no por ir a la contra sino por adelante, asumiendo el liderazgo social de ideas que le corresponde".

En su intervención, Calvo denunció la falta de oportunidades para los jóvenes: "Tenemos la sensación de que vivimos en un sistema del que no participamos. No nos gusta el país que tenemos; no tenemos las oportunidades que nos merecemos ni las garantías e que vaya a cambiar".

Para Calvo, "el PSOE ha sido el responsable de convertir en habitual lo ridículo. Se ha convertido a los jóvenes en ciudadanos de segunda clase, a los que se pide experiencia para acceder a un puesto de trabajo, cantidades desorbitadas para acceder a una vivienda y que cedan al Estado un año de su vida si hacen la 'mili', porque si es objetor ya tiene que ceder algo más".

Sobre el servicio militar obligatorio, el dirigente de NNGG dijo que es "un engaño y una obligación: nise mantiene ni se realiza por compromiso, es más, una obligación no sentida genera precisamente descompromiso, que es lo que la inmensa mayoría de jóvenes sentimos respecto de nuestra defensa nacional".

Calvo aludió a un cómic para referirse al presidente del Gobierno, Felipe González, del que se preguntó: "¿Qué es, un hombre o un pájaro? Lo primero no lo pongo en duda, lo segundo tampoco".