A esta reunión no acudió la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que también acoge entre sus miembros a víctimas de la masacre de Madrid. Peces-Barca explicó que "no se ha llamado" a este colectivo porque dio por rotas las relaciones con su institución.

Por su parte, Pilar Manjón, presidenta de la Asociación 11-M Afectados de Terrorismo, explicó a los periodistas que había trasladado al Alto Comisionado que hasta hoy había sido imposible comunicarse con la otra asociación, que preside Ángeles Domínguez.

A este respecto, Domínguez manifestó que había trasmitido a Peces-Barba su malestar por que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no les haya recibido. Asimismo, este colectivo criticó la escasa representación que se les ha dado en la comisión que debe repartir el dinero para las víctimas donado por la Confederación Española de Cajas de Ahorros.

A su vez, Manjón señaló que habían pedido al Alto Comisionado mejoras en la ley de solidaridad, la creación de créditos blandos y una revisión en las ayudas para la obtención de viviendas por parte de las víctimas, entre otros asuntos.

En este sentido, Peces-Barba resaltó que, entre las peticiones de las asociaciones, está la creación de un centro cívico para "favorecer el conocimiento entre todos ellos" en las que las víctimas puedan realizar distintas actividades, como "jugar a las cartas o al dominó".

Por otra parte, el Alto Comisionado anunció después del verano se celebrará una gran reunión con todas las asociaciones que aglutinan a víctimas del terrorismo.

El Alto Comisionado dijo que invitará a la AVT a dicha reunión, pero que les enviará el comunicado "por escrito", pues este colectivo ha solicitado recibir así las comunicaciones de la oficina de Peces-Barba.

En este sentido, el también rector de la Universidad Carlos III indicó que en ese momento quedará en manos de la AVT acudir a la reunión o rechazar dicha invitación.