En declaraciones a la Cadena Ser, Carrillo dijo que "es curioso que el hombre que ha sido llevado por Anguita a la secretaria general fuese el que encabezó en el IX Congreso del Partido Comunista la tendencia pro-soviética más sectaria y el que en el PSUC de Cataluña acabó con el eurocomunismo. Es decir, es el ectarismo llevado al cubo".

Carrillo censuró igualmente al líder histórico de CCOO, Marcelino Camacho, al señalar que le sorprende que ahora defienda una mayor influencia política en el sindicato porque "cuando yo era secretario general denunciaba la menor intromisión en Comisiones Obreras y era un defensor de la independencia sindical tremendo".

A su juicio, lo que ocurre es que la dirección comunista se siente débil y sin poder en la calle, y cree que puede recuperarlo controlando a Comisiones.Carrillo opinó que esa estrategia fracasará porque la política de crítica hacia CCOO volverá al sindicato todavía más reticente frente al PCE, por lo que a los dirigentes comunistas "les va a salir el tiro por la culata".