Las negociaciones tienen por objetivo trasladar al derecho francés el acuerdo sobre este tema adoptado hace tres años y medio en el ámbito europeo.

Dicho acuerdo fue redactado por la Confederación Europea de Sindicatos y servirá como base a la negociación francesa, pero los sindicatos galos han manifestado su intención de ir más allá de las medidas propuestas en el mismo, ya que no aborda ni el acoso, ni la violencia en el lugar de trabajo, por lo que se celebrarán reuniones específicas para tratar estos temas.

También se debatirán otros aspectos que no contempla el convenio europeo, como el derecho del trabajador a informar sobre condiciones laborales estresantes o el desarrollo de planes de prevención del estrés en las Pymes.

Asimismo, se tendrá en cuenta en la negociación el informe sobre el estrés laboral en Francia, elaborado por el economista Philippe Nasse y el psiquiatra Patrick Légeron.

Dicho documento, presentado en marzo al ministro de Empleo galo, Xavier Bertrand, denunciaba la ausencia en el país vecino de un indicador global para evaluar de forma conjunta la salud mental y las condiciones sociales y laborales.