La junta directiva de la CEIM ha apoyado por unanimidad esta solicitud de equiparación fiscal para no perder competitividad con las empresas instaladas en Euskadi.

"No pretendemos disponer de mejores condiciones impositivas y fiscales que otras comunidades, pero tampoco estar en peor situación de competitividad con empresas que se ubican en otros puntos de España, aunque sean territorios históricos", señalaron los emprearios madrileños en una nota difundida hoy.

La CEIM teme que, de no atenderse esta petición, podría aumentar el número de empresas que se planteen, "como ya ha sucedido en algún caso", el traslado de sus sedes centrales al País Vasco.