En declaraciones a Onda Cero, Moren anunció que su organización piensa tomar medidas al respecto y que le parece imprescindible una comparecencia del ministro de Interior que trate de aclarar el por qué las autoridades españolas no participaron, por lo menos, en la búsqueda, localización y recogida de los cadáveres y por qué "se ha tratado de ocultar esa tragedia a la opinión pública española".

El responsable de SOS Racismo exigió también el cese del delegado del Gobierno en Melilla por su "radical incompetencia y dehumanización notori que consideramos que es una lacra y una incompetencia absoluta de una autoridad gubernativa que no ha sabido estar a la altura de las circunstancias".

José Antonio Moreno mostró su indignación por lo ocurrido y señaló que este asunto es "intolerable" no sólo desde el punto de vista político sino al menos desde el punto de vista humanitario.

"Que nos neguemos a recoger los cadáveres y que se permita que los cadáveres estén flotando entre dos aguas durante diez días es intolerable desde el punto d vista de un Estado social y democrático de Derecho", concluyó el responsable de SOS Racismo.