Según el parlamentario andalucista Antonio Núñez, "existen numerosos pequeños y medianos empresarios que se encuentran en una situación financiera extremadamente delicada debido al impago de las deudas que con ellos mantiene la Administración autónoma y el SAS, lo que se agrava ante la obigación de hacer frente con puntualidad a los pagos de Hacienda".

El citado grupo político estima que "muchos puestos de trabajo están en peligro, si no se soluciona pronto este problema", al que achacan al enorme retraso en las transferencias estatales en materia sanitaria y al mal uso que la Administración autonómica realiza del dinero.

Los andalucistas basan su proposición no de ley ante el Parlamento autónomo en el Reglamento General de Recaudación, en el que contempla la posibilidad de compesar deudas a favor de la Hacienda Pública con créditos reconocidos por la misma.

Esta compensación de impuestos por deuda se realiza, según el PA, en aquellas comunidades autónomas en las que el Insalud tiene competencias.

El Servicio Andaluz de Salud mantiene una deuda con sus proveedores de ciento sesenta y siete mil millones de pesetas, según la Cámara de Cuentas, mientras que los andalucistas mantienen que el montante total de los impagados "es prácticamente imposible de calcular".

El PAasegura que una parte de las facturas impagadas no son contabilizadas por las distintas gerencias provinciales de salud, pese a que son reconocidas oficialmente.

La crisis económica del SAS ha llevado a que Telefónica haya cortado en los últimos días varias líneas de teléfono en algunos hospitales de la región, mientras que la Compañía Sevillana de Electricidad podría adoptar una postura similar.