La iniciativa de los Verdes, que aseguraba que 36 de los 272 pantanos proyectados en el Estado español producen considerables perjuicios en el medio ambiente, fue rechazada con el voto contrario de los grupos socialista, demócrata-cristiano y liberal.

El grupo parlamentario ecologista solicitaba en su propuesta de resolución que antes de iniciar su construcción, se realicen estudios serios de impacto ambiental de los proyectos y pedía a la CE que no conceda ayuda a los proyectos que originen daños ecológicos.

Entre los embalses con mayor impacto medioambiental figuran, según el grupo de los Verdes, el de Itoiz (Navarra), que anegará una zona de alto valor ecológico y producirá la desaparición de bosques de hayas, robles y zonas forestales en proceso de creación.