El informe de la comisión, que será votad la próxima semana por el pleno, propone la creación de una iniciativa financiada con presupuesto comunitario, que contribuya a la compensación a familias que dependen de los ingresos de sus hijos y a la escolarización de los niños trabajadores.

Otra de las medidas contempladas es la elaboración de un código de conducta al que las multinacionales podrían adherirse voluntariamente, aunque su incumplimiento no conllevaría sanciones.

Además, la comisión pide que el Reino Unido refuerce la proteccióncontra el trabajo infantil, puesto que dos millones de niños trabajan como eventuales en ese país, y que todos los Estados miembros se adhieran al Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).