La nueva norma transforma en ley el real decreto que aprobó el Gobierno en junio de 1996, si bien la diputada socialistas Angeles Amador matizó qe el texto ha sido modificado para evitar la privatización de los hospitales públicos.

La ley sobre nuevas formas de gestión de estos centros especifica que los hospitales siempre preservarán su condición de servicio público, a pesar de que Angeles Maestro, de IU, insistió en que, por el contrario, abre las puertas de la privatización y desarticula el Sistema Nacional de Salud.

La norma habilita al Gobierno y a las comunidades autónomas a determinar los órganos de dirección y control, el régimen e garantía de la prestación, la financiación y las peculiaridades en materia de personal de las entidades que se pongan en marcha para gestionar los servicios hospitalarios.

El Insalud podrá en lo sucesivo crear entidades públicas o fundaciones encargadas de la gestión de sus hospitales, algo que hasta el momento sólo ha ocurrido con los de Manacor, en Baleares, y Alcorcón, en Madrid, ambos de nueva creación, que serán gestionados y administrados por fundaciones.