La zona estaba acordonada desde una hora antes y los artificieros de la Ertzaintza estaban trabajando en su desactivación.

El artefacto acabó explotando por sí mismo y, al parecer, no ha ocasionado víctimas entre los agentes allí desplazados. La zona había sido previamente acordonada y desalojada, así como los edificios situados junto al vehículo, que han quedado seriamente dañados.

Los terroristas avisaron poco antes de las 10.00 horas de la colocación de un coche-bomba en las inmediaciones de la televisión vasca, mediante una llamada al teléfono de los Bomberos de Bilbao.

Inmediatemente se desplazaron a la zona efectivos de la Ertzaintza y de los Bomberos. Una vez localizado el vehículo sospechoso, una furgoneta de la que aún no se conocen detalles, se aisló el perímetro y se desalojaron los alrededores.

En ese intervalo de tiempo fue localizado un hombre atado a un árbol en una zona montañosa de Arrigorriaga (Vizcaya), que resultó ser el dueño del vehículo.

Durante los momentos previos a la deflagración, los artificieros estuvieron trabajando para tratar de desactivar el explosivo y controlar la zona en caso de explosión. En el momento de redactar esta información no había noticia de ningún herido.