En declaraciones a Servimedia, el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José Bono, explicó que en las negociaciones sobre las transferencias mantenidas con el Gobierno se decidió muy a última hora aceptar el traspaso de este "complejo centro".

"No queríamos un hospital de parapléjicos sólo para Castilla-La Mancha, sino un centro que pudiera seguir atendiendo, con caracter referencial, a prácticamente todo el territorio nacional", añadió Bon.

El 70% de las personas atendidas en Parapléjicos reside fuera de Castilla-La Mancha. Este hecho constatable, forzó el compromiso por parte del Gobierno central a establecer una financiación extra, "porque las cuentas no nos saldrían", apuntó.

El Fondo de Desplazados fue creado por el Estado en el acuerdo de financiación autonómica para compensar a las CCAA por los gastos que ocasionen ciudadanos desplazados a su territorio o tratados en centros de referencia nacional para patologías complejas.PROBLEMAS DE FINANCIACION

Para el presidente Bono, los problemas del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo son básicamente de financiación, y reconoció que ha sido un centro "muy mal tratado financieramente", dijo.

A su juicio, de todos los centros que han recibido, Parapléjicos es "lo más complicado". "Espero que lleguen noticias sobre la mejora de la atención y sobre la solución de sus problemas con cierta rapidez, aunque el problema básico era de financiación".