"Estamos es una situación de polarización de la política vasca que no es bueno, ya qu aún faltan varios años para las elecciones vascas", afirmó.

El líder de IU propuso abrir un diálogo en torno al Estatuto de Autonomía y reconoció que "hay treinta y tantas competencias que están pendientes y no son negociadas por el Gobierno central". A su juicio, la responsabilidad a la hora de desbloquear la situación y dar contenido al Estatuto de Gernika es del Gobierno de Aznar y de todas las instituciones, "sin exclusión".

Asimismo, dijo que sería una extralimitación tomar decisiones unilaerales e intentar imponer soluciones "autoritarias", quitando competencias al Gobierno vasco. "Creo que es una escalada de amenazas que deben llevar de nuevo al diálogo y a la racionalidad política", manifestó.

Preguntado por una posible suspensión del Estatuto de Gernika, afirmó que sería una "barbaridad", ya que lo que ha hecho el Gobierno vasco es "emplazar al Gobierno de José María Aznar al diálogo para que negocie las competencias y dé contenido al Estatuto".