El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, ha ordenado investigar cualquier resquicio legal del "plan Ibarretxe" y piensa mostrar su total oposicion en una declaración institucional que aprobará el viernes su consejo, según informaron a Servimedia fuentes del gobierno regional.

El manifiesto define el proyecto soberanista del Gobierno vasco como "un instrumento que siembra la discordia, la desigualdad y que sirve a intereses no confesables del nacionalismo vasco". Lo rechaza "de plano"y muestra su "apoyo total" a las iniciativas políticas y legales puestas en marcha por el Ejecutivo de José María Aznar.

La Generalitat quiere expresar con esta iniciativa su respaldo y adhesión "sin fisuras" a la Constitución de 1978, que define como el mejor instrumento para garantizar la democracia, la libertad, los derechos humanos y la prosperidad.