El portavoz de ASES, David Crevillén, dijo a Servimedia que le consta que los escoltas de al menos dos empresas que trabajan en la comunida vasca mantienen serias diferencias con sus superiores y barajan la posibilidad de renunciar.

Crevillén justificó el malestar de estos empleados debido a que los responsables de Interior impiden a los vigilantes que dan protección personal ir a la huelga, pero tampoco se negocia con ellos.

Agregó que si las condiciones de trabajo no son las adecuadas y "los trabajadores no podemos ir a la huelga, como hemos intentado, lo único que queda es decir 'me marcho'". "Si siguen las cosas así, nos encontrremos con que dentro dentro de un año no habrá nadie que quiera ir a trabajar como escolta al País Vasco y Navarra".

Entre las reivindicaciones que los escoltas vienen planteando en los últimos meses se encuentran mejoras salariales, placas de matrícula para vehículos oficiales, doblar los servicios de protección (que se realicen por parejas), chalecos antibala o inhibidores de frecuencias para neutralizar artefactos explosivos por control remoto.