Knörr señaló, en declaraciones a la Ser, que uno de los aspectos más preocupantes que los empresarios vascos observan en un momento tan difícil y tan delicado como el actual es la "incomunicación" existente entre los gobiernos de Madrid y Vitoria.

A su juicio, los patronos vascos han sido "contundentes, claros y precisos" en sus reclamaciones para que después de 23 años de vigencia del Estatuto de Gernika finalicen los traspasos de las competencias que corresponden al Gobierno vasco.

"Aoche me daba mucha envidia ver cómo, con toda normalidad, había encuentro entre el presidente (catalán, Jordi) Pujol y el presidente del Gobierno (José María Aznar). Eso yo lo quisiera ver aquí y eso lamentablemente no existe. Hay que recomponerlo con todas nuestras fuerzas y con todo nuestro apoyo", aseveró.

En este sentido, señaló que los empresarios vascos harán "todo lo necesario" para que haya "de una vez por todas" ese diálogo que, "sobre todo en estos tiempos tan difíciles, es preciso entre losgobiernos central y vasco".

RUPTURA SOCIAL

El presidente de la patronal vasca realizó estas declaraciones tras el encuentro que ayer mantuvo con el "lehendakari", Juan José Ibarratxe, en el que éste le explicó su plan para que Euskadi se convierta en un Estado libre asociado a España.

Knörr señaló que Confebask opina que el proyecto de Ibarretxe "no es exactamente lo que este país necesita", porque puede "profundizar en la crispación actual y en la división que actualmente existe a nivel partidsta e institucional", lo que podría derivar en "una ruptura social".

A su juicio, es "un planteamiento que recoge solamente, quizás, la sensibilidad de una parte de la ciudadanía vasca y no cuenta con los intereses de otra parte importante, aproximadamente el 50 por ciento, que tiene otra sensibilidad política".

"En lugar de plantearlo como un hecho consumado, quizás hubiese sido prudente haber consultado en una fase previa, antes de sacar ese planteamiento, con otros partidos políticos y agentessociales", dijo.